Peregrinos
Desde tiempo inmemorial, peregrinos de las más diversas religiones buscaron lo sobrenatural dirigiéndose a un lugar preciso, en el que se participa de una realidad diferente a la realidad mundana. Alejándose del ruido cotidiano les fue posible lograr un contacto más íntimo con Dios que en la inconmovible rigidez de la diaria rutina. E iniciaron su marcha dirigiendo sus pasos a lugares sagrados para vivir en el camino experiencias espirituales imborrables.
Así surgieron los caminantes peregrinos.
Partimos en peregrinación y movidos por nuestra fé vamos a visitar lugares sagrados para cumplir con nuestros votos, promesas y ofrendas, para meditar y orar, para acercarnos a lo sagrado y retornar luego con nuevas fuerzas a nuestra rutina cotidiana.
Entre nuestras diversas motivaciones se cuentan el deseo de interrumpir lo habitual para ir a la búsqueda de la inspiracion divina y de experiencias místicas, para reflexionar acerca de nuestra existencia, para reencontrarnos con la naturaleza, para reconocernos a nosostros mismos… y tambien para satisfacer un vago y difuso espíritu interior de viaje y aventura...
Una peregrinación es una vivencia básica que nos ayuda a comprender mejor nuestra existencia. Los peregrinos experimentamos esperanzas y anhelos, frustraciones y desencantos, que compartirmos con nuestros compañeros de senda. Así aprendemos también a superar las desilusiones y escollos que encontramos a diario en el camino de nuestras vidas, renovándonos en el tránsito al reino de Dios.
(Adaptación libre de una página del actual Gotteslob alemán)
